Llego al supermercado y me encuentro los huevos a temperatura ambiente ¿debo llegar a casa y meterlos en la nevera o los dejo fuera siguiendo el ejemplo de los comercios?
La cáscara del huevo es una estructura porosa que deja pasar el oxígeno necesario para que crezca el embrión pero también bacterias como la Salmonella. Está rodeado por una cutícula trasparente que actúa protegiéndolo.
Esta cutícula es muy sensible a los cambios de temperatura. Se vería afectada si en la granja está a una temperatura, a otra en el camión de trasporte, llega al supermercado y se refrigera, camino a casa de nuevo una temperatura mayor y en el hogar en la nevera.
¿Cuál es entonces la recomendación? Para evitar estas fluctuaciones de temperatura se recomienda que el huevo esté a temperatura ambiente hasta llegar a nuestras casas y en ese momento debemos guardarlos en la nevera para una mejor conservación.
¿En la puerta? La respuesta es no. La puerta de la nevera es el lugar donde la temperatura es menos constante. Los guardaremos en el interior del refrigerador en su envase original. Así evitaremos que la cutícula se vea alterada con el riesgo de que las bacterias como la Salmonella entren en el interior del huevo.
María Egusquiza
Dietista – Nutricionista
Nº de colegiada: EUS00025